Boletin Epidemiológico 2007
Resumen de la Situación Epidemiológica Nacional
Semana Epidemiológica N° 52 – 23 al 29 de Diciembre de 2007
Año de edición LVI
Enfermedad de Chagas por Transmisión Oral Una forma emergente de diseminación
El mal de Chagas es una enfermedad grave, en ocasiones mortal, constituye una zoonosis y es ocasionada por el protozoario Trypanosoma cruzi. Se registra principalmente en América Latina, donde de acuerdo a estimaciones de la OMS, durante la década de los años 80, se encontraban infectados más de 20 millones de personas. Se han realizado enormes esfuerzos para controlar la infección, y las estimaciones actuales indican que el número de personas infectadas es inferior a 8 millones. Siendo una enfermedad mayoritariamente transmitida por vectores, por vía transfusional y por vía congénita, en la actualidad y bajo determinadas situaciones epidemiológicas, ha demostrado su capacidad de transmisión por vía oral a través del consumo de alimentos contaminados, lo que origina la aparición de brotes de enfermedad de transmisión alimentaria por este agente hemoflagelado. Se trata de una forma de la enfermedad, que conlleva una forma de «microepidemia», con casos graves e importante letalidad.
El conocimiento acumulado sobre la transmisión oral de la enfermedad de Chagas es limitado, ya que su ocurrencia ha sido reportada en forma esporádica, como brotes aislados; y, por más contundentes que hayan sido las evidencias reunidas en la investigación de los mismos, ha existido una excesiva reserva en la viabilidad de este mecanismo de transmisión. En 1936 se sospecho por Mazza, et. al. en Argentina de la posibilidad de la transmisión oral, así mismo se encuentran experiencias en Ecuador, Colombia y Brasil.
El primer episodio documentado ocurrió en el año de 1965 en una comunidad agrícola en el estado de Rio Grande do Sul, Brasil, que presentaron enfermedad febril grave. Nadie de inicio consideró tratarse de enfermedad de Chagas, una vez que no habían triatominos en los domicilios. La micro-epidemia acometió a 17 personas, de las cuales 5 murieron en un período de hasta 40 días. Los exámenes anatomopatológicos realizados en dos de los pacientes, mostraron «nidos» de Trypanozoma cruzi en el músculo cardiaco. La investigación demostró que vegetales consumidos habitualmente por la población afectada serían la fuente de T. cruzi, muy probablemente contaminados por secreciones de glándulas anales de marsupiales. En el año 2005, un brote registrado en un área turística del sur de Brasil, llamó la atención internacional en función de haber afectado a un grupo de turistas internacionales y haber registrado alta morbilidad y mortalidad.